El aporte de ALMA que hace avanzar a "La nave del Desierto"

"Es como si estuviéramos en una nave espacial", dice Paulina Rodríguez, una de alumnas de la escuela E-21 de Toconao que visitó las antenas del observatorio ALMA, en San Pedro de Atacama.

Como ella, sus compañeros de colegio son los beneficiados por el convenio de trabajo que comenzó en 2008 entre ambas instituciones y cuyos resultados quedaron grabados en 15 minutos de documental, donde el significado del nombre del pueblo ("La nave del desierto") cobra más sentido que nunca.

El video muestra el aporte realizado por ALMA para que los niños cuenten con los materiales para hacer experimentos y desarrollen su espíritu crítico en la aplicación de las materias mediante el método ECBI (Educación en Ciencias Basada en la Indagación).

Además, los alumnos comenzaron con clases de inglés a las que también pueden acceder sus padres y otros adultos, con tal de desarrollar de mejor manera la artesanía y aprovechar el turismo en la zona que aumentará cuando el complejo de 66 antenas parabólicas sean inauguradas este miércoles.

"Esto nos ha llevado a ocupar por dos años consecutivos el primer lugar en la región y ser la escuela municipal con los mejores puntajes (Simce)", señala el director del establecimiento, Eduardo Navarrete.

 

Pese a los avances, los estudiantes siguen conectados con sus raíces y tienen una cercana relación con la astronomía, pues aprenden cómo sus antepasados "leían" el cielo para predecir una buena cosecha, entre otras cosas.