El jueves en la noche Gabriel Boric, mediante cadena nacional, anunció la estrategia con la que el Estado buscará tomar el control de la industria del litio, un mineral que está experimentando un boom producto de los altos precios que se están transando en el exterior.
“Nuestro desafío es que nuestro país se transforme en el principal productor de litio del mundo”, dijo el mandatario, quien agregó que, en una primera etapa, se considerarán joint ventures, sociedades o contratos donde el Estado sea siempre el controlador del mineral.
Una vez que entren en vigencia esas primeras iniciativas, se constituirá la Empresa Nacional del Litio, una entidad 100% estatal y que tendrá la misión de explotar los salares bajo una articulación público-privada, pero siempre con el Estado como controlador.
Para esto, el Ejecutivo tiene previsto sostener diálogos con distintas comunidades que conviven con los salares. Luego de esto -se proyecta que será el segundo semestre- enviarán al Congreso el proyecto de ley que crea la Empresa Nacional del Litio.
Y a pesar de que todavía no comienzan los diálogos formales con las comunidades involucradas, algunas ya han reaccionado ante el proyecto del gobierno.
Por ejemplo, el miércoles (un día antes del anuncio del gobierno) el Consejo de Pueblos Atacameños, CPA -entidad que reúne a 18 comunidades de la zona-, sostuvo dos reuniones clave: la primera, con el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente, y la segunda, con expertos de la OCDE, el gobernador regional de Antofagasta, Ricardo Díaz; el alcalde de San Pedro de Atacama, Justo Zuleta, y el rector de la Universidad Católica del Norte, Rodrigo Alda.
Con todos ellos -actores relevantes en la elaboración de la Estrategia Minera Región de Antofagasta (EMRA) 2023-2050- abordaron la instauración de la Política Nacional del Litio y la forma en que se está llevando a cabo dicho proceso.
En ese contexto, Vladimir Reyes, presidente del CPA, tomó la palabra y señaló que “lo central es cómo nosotros pagamos este proceso que se lleva a cabo (minería del litio). Debemos alzar la voz para que el pueblo atacameño esté presente en todas las situaciones antes que se vayan implementando políticas en perjuicio de nosotros”.
“Vamos a generar propuestas”
“Nosotros habitamos más de 11 mil años esta zona y queremos una participación activa de las decisiones que toma el Estado”, comenta a DF MAS Vladimir Reyes. “Hay una preocupación, porque nunca nos han consultado. Siempre llegan y hacen. Estamos preocupados por nuestro salar, vivimos en un desierto y el recurso hídrico es relevante para la supervivencia de nuestras comunidades”, agrega el dirigente.
Su objetivo es cambiar las cosas que están pasando actualmente. “Las empresas gravemente perjudicadas están afectando el medioambiente y usan el agua más de lo permitido. Hay lugares que se han ido secando, y eso es algo que no podemos permitir”, agrega Reyes.
Otra de las preocupaciones que comparten las comunidades atacameñas es el rol que tendría una filial de Codelco en la propuesta del gobierno. “¿Cómo será su desempeño en términos ambientales?”, plantean.
Sobre los detalles de la Política Nacional del Litio, Reyes comenta que no quieren “dar muchos detalles antes de hablar con el gobierno”.
Están esperando hablar con el Presidente Boric y que él llame a una reunión a más tardar el próximo lunes. “Queremos que nos ponga una fecha pronto. Nosotros nos convocamos y vamos a manifestar. La preocupación existe y vamos a generar propuestas. Estamos dispuestos al diálogo, no sólo queremos escuchar. Y eso es muy importante”, agrega. “A veces transcurre el tiempo y eso hace que los dichos se vayan dilatando”.
El encuentro, afirman, quieren que sea con el mismo Boric. “No un intermediario, queremos que esté el Presidente para darle a conocer nuestras preocupaciones. La idea es construir una comunicación fluida”, concluye.