Recuerdan legado de exacadémica de la UCN “Cuca” Gutiérrez”, fallecida en San Pedro de Atacama

Envie este Recorte Version de impresion de este Reportaje Publicado el 01 de octubre de 2019 Visto 293 veces
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UCN

Durante 10 años ejerció la docencia en la Escuela de Arquitectura, siendo la promotora y fundadora del Cedarq.

“Una cultura que nace de la tierra y se desarrolla en la Tierra, eso es lo que para mí define una cultura de tierra, porque no es solamente hacerla de tierra sino que genera todo un mundo hacia el interior en la vida cotidiana”, es lo que sentía y expresaba María Magdalena Gutiérrez, la “Cuca”, para quienes la conocieron, al ser consultada sobre qué es “Culturas de Tierra” en una entrevista que dio al sitio web https://www.plataformaarquitectura.cl, en diciembre de 2013.

La arquitecta María Magdalena “Cuca” Gutiérrez, quien falleció recientemente a los 85 años, tiene su historia grabada en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica del Norte (UCN). Junto con ejercer como académica, su visión permitió desarrollar el Centro de Documentación de Arquitectura, Cedarq, el que hoy está en plena reestructuración de su espacio físico.

La “Cuca” se tituló de arquitecta en la Universidad de Chile, después de unos años dedicada a la docencia en dicha institución superior, se traslada al norte. En la UCN trabajó durante 10 años, después de una reflexión profunda decide adoptar como su lugar en la tierra San Pedro de Atacama, dejando la vida universitaria para instalarse definitivamente ahí.

TIERRA CRUDA
Es precisamente en dicho espacio geográfico donde terminó por profundizar, fundamentar y especializar su trabajo en arquitectura con “tierra cruda”, todo esto unido a una fuerte labor comunitaria, que se consolida con la creación, en el año 2006, de la Fundación “Patrimonio Vivo”, con el objetivo de resguardar todas las ramas del arte que se dan en la zona de San Pedro de Atacama.

Desde ese lugar, promovió y gestó proyectos constructivos y culturales para la re-valorización y visibilización del patrimonio del desierto de Atacama. Este trabajo le ganó el reconocimiento de la Red ARCOT, que la declaró como “el alma de Red ARCOT” por su trabajo en rescatar los modos culturales constructivos. Sus colegas la reconocieron en 2018; el Colegio de Arquitectos de Chile le otorgó el Premio “Manuel Moreno Guerrero” por destacarse en la valoración del patrimonio arquitectónico nacional.

OBRAS
Algunas de sus obras arquitectónicas, son las que realizó entre 1976 a 1986 en el Servicio de Construcciones Universitarias, Universidad de Chile. Obras de infraestructura universitaria: Biblioteca Facultad de Filosofía, en colaboración con la arquitecta Virginia Prieto; Laboratorios en Facultad de Medicina y Medicina Veterinaria; Aulas Universitarias; Oficinas y Bibliotecas en diversas facultades y equipamiento deportivo.

En Antofagasta destaca el proyecto de la Parroquia “El Buen Pastor” en 1993, en colaboración con los arquitectos Luis Alfaro y Hernán Pizarro. 1.580 m2 construidos. Aunque el proyecto no se concluyó como originalmente se había propuesto, tiene una línea arquitectónica que revela los principios que buscó impregnarle “Cuca” a la obra, especialmente buscando el nexo con el territorio y la tradición que existe en el sector con los Bailes Religiosos.

En San Pedro de Atacama, destacan el Hotel Kimal de 1994, también los arquitectos colaboradores Luis Alfaro y Hernán Pizarro acompañaron a la arquitecta. Son 1.200 m2 construidos. Es reconocido como el primer hotel que es levantado con sistemas constructivos tradicionales de la zona.
La Casa Taller en Ayllu Solcor de 1998, colaboradores Magdalena Barrenechea y Pablo Barrenechea, en total son 200 m2 de construcción. Finalmente, la Casa Yaye, también en San Pedro de Atacama en 2007, arquitecto colaborador Camilo Giribas, con 400 m2 construidos.

Fotografías cedidas por Arquitecto Jorge Guerrero Araya.



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UCN

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