Imágen del municipio
Imágen del municipio
Con asistencia de todos los concejales, el alcalde y el administrador municipal, el 21 de diciembre del año pasado se realizó el segundo concejo municipal en San Pedro de Atacama. Como recordaremos, en la primera sesión que se hizo junto a la ceremonia de instalación, ya se había producido un gallito entre el alcalde y los concejales, cuando ante la propuesta de este de continuar con las reuniones los días jueves, la concejala Maria Teresa Véliz planteó a moción de hacerlas los miércoles. Se votó y excepto por Humberto Argandeña Catur, todos votaron por esa moción.
Así que el miércoles 21 fue la segunda sesión, aunque la primera en abordar temas propios de la administración del municipio. Si alguien pensaba que se pediría una auditoria sobre la anterior administración de Sandra Berna, se llevó una decepción, porque no se mencionó el tema. Si, nosotros esperábamos algo de eso.
Por momentos, parecía una reunión de las antiguas, ya que la coordinación seguía llevada por la misma secretaria municipal, Roxana Aranda, y con la presencia del mismo director de Control, Manuel Garrido. El único nuevo era el administrador municipal, Mario Díaz Hinojosa, aunque hubo una breve comparecencia de la nueva directora de la Secretaria de Planificación Comunal (Secplac), Mariana Jerez.
Luego de la lectura de cartas e invitaciones, se pasó al tercer tema de la tabla, la definición de comisiones y encargados de estas. Recordemos que estas comisiones no tienen demasiado peso en las decisiones administrativas, y son más bien instancias en que se recopila y ordena información sobre el tema en cuestión, se generan informes sobre el asunto, para luego tomar los acuerdos por votación en las sesiones plenas del concejo.
Las comisiones y sus encargados (presidentes de comisión) son las siguientes:
Educación, Marcela Ramos
Fomento productivo, Marcela Ramos
Salud, Humberto Argandoña
Seguridad Ciudadana, Ricardo Vilca
Cultura y Turismo, Manuel Cortés
Deportes, Manuel Cortés
Energía, Nazario Tito
Vivienda y Urbanismo, Nazario Tito
Medio Ambiente, Maria Teresa Véliz
Desarrollo Social, María Teresa Véliz.
En esta instancia se dio la primera jugada política, cuando postularon al cargo de presidenta de la comisión de Salud Maria Teresa Véliz y Marcela Ramos. Ambas dieron sus razones para asumir el cargo y en la votación subsiguiente todos votaron por la concejala Ramos, seguramente por que encontraron que su argumento de que tenía hijos y era técnico en seguridad pesó más que la experiencia en educación y el título de asistente social de la concejala Véliz.
El resto de las nominaciones no fueron tan discutidas.
El siguiente tema fue la modificaciones de los presupuestos 2016 y 2017, que el concejo anterior (recordemos que cuatro de los miembros se repiten en este) había aprobado en su última sesión. Dada la importancia del tema y ya que no se tenia toda la información a la mano, el alcalde en uso de sus facultades, citó a una reunión extraordinaria para tratar este tema, el día 27 de diciembre.
Luego se vio la solicitud de un ciudadano de cambiar su razón social en la patente de alcohol, lo que fue aprobado sin problemas y después se pasó a analizar la situación del Pueblo de Artesanos y terminal de buses, para lo que se hicieron presentes Fernando Espíndola, encargado de finanzas del municipio y Luís Carvajal, el administrador del pueblo y terminal de buses.
El tema planteado era que el 31 de diciembre se vencen los contratos del recinto y debían tomarse decisiones respecto a ese tema.
El señor Espíndola entregó una serie de cuadros con estados de pagos y diversos antecedentes sobre los arriendos en el pueblo de artesanos y en el terminal de buses, los que además de los arriendos de locales incluyen los derechos de losa de las empresas de transporte.
En el primer caso, existen algunos locatarios que registran morosidades históricas, pero en general están todos al día al 15 de diciembre. La concejala Ramos planteó que en caso de que alguno de los locatarios se atrasara, se aplicara el contrato y se lo sacara, para darle preferencia a un artesano lickanantay.
El señor Carvajal indicó que por un lado, seria injusto, por cuanto alguno de los locatarios que registraban morosidades se había mantenido en el pueblito durante tiempos muy difíciles en que al recinto no entraba nadie. “Hasta el año pasado habían locales desocupados”.
También indicó que el había ido “pueblo por pueblo” y hablado con muchos artesanos indígenas y ninguno se interesó en instalarse en el Pueblito. Recordemos que este proyecto partió justamente como una iniciativa para una asociación de artesanos lickanantay de los cuales se destacaba doña Evangelista Sosa.
También indicó que si bien no eran lickanantay, los locatarios del Pueblo eran efectivamente artesanos y producían directamente. Hizo un paralelo con la feria contigua al municipio, que también había surgido como un apoyo a los indígenas, pero que vendía ahora casi exclusivamente “artesanía” boliviana.
Ramos le indicó que estaban hablando de los retrasos.
En el ítem del terminal de buses, algunas empresas registran morosidad en sus pagos de derechos. Los casos más notables, Turbus, que aparece que no ha pagado nunca, y Ktur, que más por el monto adeudado, resonó por ser propiedad del alcalde.
De hecho la concejala Ramos interpeló al alcalde sobre ese aparente conflicto de interés. Catur le indicó que hacía meses no participaba en la administración de la empresa, de la cual se estaba deshaciendo oficialmente, para lo cual la ley le da un plazo de 30 días después de su instalación. Así como ese mismo plazo para hacer su declaración de intereses, al igual que los concejales.
En el caso de Turbus y en el de Ktur, las morosidades según lo que se discutió, aparecían más que como no pago, como un problema de procedimiento administrativo. Ya que si la empresa pagaba vía transferencia, debía acudir después a la oficina de finanzas del municipio, con un impreso del comprobante de transferencia para validar el pago. Sin embargo, ningún concejal ni el alcalde indicaron lo obvio. Que ese sistema es burocrático e ineficiente.
Si bien Carvajal y el encargado de finanzas mostraron un resultado de excedentes (17 millones en el caso del terminal, 2,6 millones en el caso del pueblito) los concejales pidieron una información financiera mas detallada, por lo que se solicitó que se realizara un trabajo de comisión.
Además se mencionó la necesidad de invertir esos excedentes en asuntos importantes, como la seguridad del terminal, como indicó la concejal Véliz. El concejal Argandoña sugirió la necesidad de una planificación general de la gestión del pueblo y el terminal.
Así que el futuro de los contratos del terminal, quedó en veremos en la sesión.
Luego se pasó al tema de la fundación de cultura. El alcalde indicó que se debían nombrar los directores de dicha organización y que el nombraba a Wenceslao Reyes Chinchilla y a Tomás Vilca.
Eso suscitó una pequeña discusión cuando los concejales Ramos y Tito indicaron que no les parecía que se nombrara a Reyes, por ser “un poco confrontacional”.
El administrador municipal tuvo que recordarles a ambos concejales que el nombramiento de los dos directores es una atribución del alcalde y no está a consulta de los concejales, así como el alcalde no puede discutir los nombramientos que hagan los concejales. Los concejales designaron a Manuel Cortés como el director que debe salir de los concejales y a Jimena Cruz, la que ya estaba ejerciendo el cargo.
El alcalde indicó que ya definido el directorio se procedería a designar al nuevo presidente ejecutivo de la fundación, en uso de su atribución. Aunque no indicó el nombre de la persona elegida.
Luego se pasó a la aprobación de un contrato eléctrico para la mantención de redes y generación eléctrica en las localidades alejadas y con eso se terminó la tabla preparada por la secretaria municipal.
Luego en temas varios, el alcalde planteó su petición de que se aprobara por parte del concejo, la creación del cargo de Jefe de Gabinete, que en la administración anterior había sido ejercida de facto por el señor Hugo Miranda, a un costo superior al que se planteaba al generar oficialmente el cargo.
Se encontraba presente el futuro jefe de gabinete, el señor Claudio Maldonado. Se produjo una discusión sobre el tema en que se notó las discrepancias entre el administrador municipal y la secretaria y jefe de control que heredaron de la anterior gestión. Ahora, ambos empleados hicieron mucho hincapié en la necesidad de hacer cambios en la definición de cargo para no tener problemas con la contraloría. En esto fueron apoyados por Véliz, Ramos, Cortés y Vilca, que pidieron que antes de hacer efectiva la creación del cargo y por ende la contratación del señor Maldonado, se pidiera una consulta a la contraloría.
Además, la concejala Ramos se quejó de que se le diera preferencia a la contratación de una persona no atacameña para el cargo. Hubiera preferido “alguien local”. Curioso, ya que ella que fue funcionaria municipal y compañera de tienda política de la anterior alcaldesa, nunca había en los años de esa administración manifestado esa queja, considerando que la mayoría del staff de Berna eran justamente no atacameños (esa parece ser ahora la forma elegante de decir afuerinos). La mejor prueba, los dos funcionarios que estaban presentes en la sala.
Un dato interesante: El señor Maldonado es concejal en Calama, por Renovación Nacional.
También en varios, se definieron las fechas de las sesiones de enero, que quedaron el 4 de enero en la mañana y dos reuniones el 11, para completar las tres que deben realizarse en el mes.
La concejala Véliz propuso que al menos una de las reuniones mensuales se realizara fuera del edificio consistorial, en alguna comunidad o junta de vecinos. Luego de varias opiniones, se decidió que se iba a realizar una reunión al mes fuera del municipio, mientras alguna comunidad o junta de vecinos lo solicitara.
Ricardo Vilca pidió al alcalde que presentara su equipo de trabajo, ya que el tenia mucha curiosidad sobre eso. Aliro Catur le indicó que las tres personas contratadas hasta ese momento eran el administrador municipal, Mario Díaz, la Secplac, Mariana Jerez López y como se había visto, se consideraba al futuro jefe de gabinete, Claudio Maldonado. También dijo que en próximos días, el equipo crecería y todos serían oportunamente informados.
Luego se vio un reclamo proveniente de Solor, según Marcela Ramos, contra la directora de la escuela, Sandra Chávez, por el trato con los alumnos y apoderados. Según la concejala, estos reclamos eran muchos y estaban preocupados porque iba a asumir la dirección. El administrador municipal indicó que se había solicitado información a la directora del DAEM, Marlene Zuleta (Si, también sigue ahí) y lo que habría comentado Zuleta es que es la primera carta que había llegado y que otras denuncias habían sido desestimadas en el pasado. El administrador dijo que el alcalde iba a estar atento a la situación.
Luego se vieron algunas solicitudes de apoyo de distinto tipo de algunas organizaciones y se terminó la reunión con la discusión sobre si se reembolsarían a los concejales sus gastos de combustible para cuando tuvieran que acudir a diversas instancias oficiales en razón de su cargo. Finalmente sobre eso se abordo solicitar información a la contraloría sobre como abordar el problema.
Finalmente
Si bien hubo un cierto nerviosismo y se notó la falta de experiencia de los nuevos concejales y del nuevo alcalde, más allá de los temas en discusión se pudo percibir como se están conformando las fuerzas políticas para el futuro. Está claro que la concejala Ramos, con el apoyo de Tito y Manuel Cortés, va por el alcalde Catur. Si bien teníamos claro que el concejo no iba a ser dócil frente al alcalde, se está comenzando a manifestar como de oposición. Y la vos cantante parece que la va a llevar la concejala Ramos, que repite su lema de lo lickanantay en casi cada tema, aunque no venga mucho al caso. Pero recordemos que ella es militante de la Democracia Cristiana, antes que nada, y como en el caso de la anterior alcaldesa, aunque con mucho menos pericia, dada su inexperiencia, blande la causa indígena como caballito de batalla.
Nosotros esperábamos que fuera la concejala Véliz quien llevara la voz cantante en la oposición al alcalde, pero parece que las fuerza al interior de la coalición de gobierno han cambiado.
Por parte de los partidarios del alcalde, como debieran ser los concejales de la UDI, es claro que solo Argandoña es fiel a la corriente que lo eligió. Vilca, por lo que vimos, también se va a alinear con la concejala Ramos. Y Manuel Cortes, parece que no va a ser tan independiente.
Lo que vimos en este concejo fueron actitudes que nadie en el periodo anterior se hubiera atrevido a tener con la alcaldesa. El conato de discusión sobre los nombramientos de la fundación fue un buen indicador de esto.
También creemos que esta nueva administración está completamente decidida a hacer todo al pie de la ley, consultando o al menos tomando en cuenta en casi cada paso a la contraloría. Es decir las antípodas de la anterior administración. Pero hay que ver si esta quizás excesiva pleitesía a dicho organismo tiene que ver con respeto a las formas o también es porque se sabe que la contraloría regional es parte de la fuerza que realmente gobierna esta región y de la que por ahora, el alcalde Catur no es parte.
Finalmente. No es venganza, ni retribución. Es política. No se puede partir una nueva administración, sin revisar la anterior. No se puede partir sin objetar a la anterior, sobre todo cuando hay tantos antecedentes e irregularidades flagrantes. Si no se hace el ejercicio mínimo de revisar, uno corre el riesgo de convertirse en cómplice, o algo peor.
Solo un ejemplo. ¿Las demandas que la constructora Procoin tiene contra el municipio, por el asunto del museo, ya fueron desistidas? ¿Va Catur a hacerse responsable del desastre del museo, como si nada?
¿Vamos a continuar con una dirección subrogante de Salud? ¿Y las plantas de “tratamiento” de agua en Camar y Socaire? ¿Y el jardín infantil de Toconao? Y etc. etc.
Por supuesto, una sola sesión no necesariamente marca una tendencia. Por ahora, las reuniones de concejo municipal están siendo más entretenidas y menos un tramite rutinario como eran en la anterior administración, en que Berna no tenía una oposición real. Veremos como se desarrolla esto a futuro.