Calama es una zona de minería. La provincia El Loa es conocida por sus recursos naturales, sobre todo por el cobre que desde hace ya bastante tiempo brinda el sustento económico, no sólo de la zona , sino que también de todo el país.
No obstante, antes de que llegara este boom minero, Calama y sus alrededores eran oasis agrícolas, pero con el agotamiento del río Loa y la contaminación de sus aguas la historia comenzó a cambiar.
En la actualidad, aun cuando el cobre se encuentre en crisis y empresas decidieron reducir personal debido a esta problemática, se sigue pensando en Calama como una zona minera. Hace un tiempo atrás se aprobó el proyecto RT Sulfuros, el que puso en la palestra el tema de la contaminación por la oposición de la comunidad de Chiu Chiu y organizaciones ambientalistas de la zona, específicamente por el tranque de relaves Talabre.
Estas mismas organizaciones son las que hoy dicen basta y culpan a las autoridades por el daño que la minería habría causado en el ecosistema loíno.
Contexto
Según el libro "Atacameño" la industria minera, con el pasar de los años, tuvo importantes consecuencias sobre los recursos naturales de la zona. "Al consumir gran cantidad de agua y aumentar notablemente la demanda de madera para construcción, procesos industriales y domésticos, se produjo una tala intensiva de bosques como el algarrobo y el chañar, explotándose también la llareta o yareta - vegetal combustible- hoy en estado vulnerable", declara el texto.
Por otro lado, ya hacia el año 2000 el río Loa es declarado como agotado, debido a la petición de la comunidad, quienes alegaron contra las empresas mineras por el gran consumo del agua de río para los procesos.
Unos años más tarde se decreta a Calama como zona saturada por material particulado MP10. Se instala una red de monitoreo medioambiental en puntos de la capital de la provincia y en Chiu Chiu, los que son administrados por Codelco, quienes entregan a la autoridad ambiental los índices.
Hacia el año 2009, el doctor Andrei Tchernitchin, en ese entonces secretario técnico del departamento de Salud Pública y Medioambiente del Consejo Regional Santiago del Colegio Médico de Chile, dijo que el 95% de la contaminación de la comuna de Calama provenía de las mineras.
El año pasado se informó sobre la alta amenaza de la ranita del Loa (Telmatobius dankoi) debido a diversos motivos como la contaminación de las aguas, el fuerte avance de la urbanización en Calama y episodios de contaminación del río Loa, así como también por la extracción masiva de agua con fines productivos.
Actualmente, el conflicto se enfoca en el proyecto de RT Sulfuros, el que ya recibió la aprobación ambiental, a pesar del rechazo de la comunidad indígena de Chiu Chiu.
Red de mujeres El Loa
La presidenta de la Red de Mujeres El Loa y dirigente loína, María Robles, es una de las opositoras al proyecto RT Sulfuros y a lo largo de los años participa en diversas campañas para proteger el caudal del río y la contaminación, ya sea por mineras o por la población.
Robles, dice que "a estas alturas el daño que causa la minería es demasiado evidente. Y eso se traduce, por ejemplo, en una merma considerable del caudal del río Loa", enfatiza la dirigente. De la misma manera, asegura que en varias épocas del año no se respeta el caudal ecológico que está normado.
Destaca que el daño del oasis se traduce en la disminución de la agricultura: "Se han perdido las hectáreas cultivables. Muchos suelos están siendo usados por la industria inmobiliaria y las mineras extraen de las aguas del río", dice María Robles.
Recalca que las empresas realizan todo esto cumpliendo las normas, pues - en sus palabras- "las leyes están hechas para que la minería explote los recursos naturales sin control alguno", asegura la presidenta de la Red de Mujeres.
Es por este motivo, que según María Robles, el Estado, los gobiernos y autoridades de turno serían los principales culpables del daño al ecosistema loíno. "Han sido bastante permisivos con respecto al daño y a la destrucción. Algunas autoridades fueron seremi s de Agricultura y luego terminaron trabajando en mineras", puntualiza la loína. Finalmente, recalca que "la aprobación de RT Sulfuros demuestra que las autoridades no tienen un compromiso moral con la ciudadanía y nos siguen maltratando", dice María Robles.
Falta de compromiso
La dirigente acusa de falta de compromiso a las autoridades, quienes "no viven acá. No respiran el polvo tóxico que nosotros absorbemos en Calama por el tranque de Talabre. Además, el hecho de que Codelco tenga a cargo las estaciones de monitoreo es paradojal y sospechoso", recalca la dirigente.
María Robles dice que lo ideal es que la municipalidad tenga a cargo estaciones de monitoreo que estén bajo el resguardo de alguna universidad como la Universidad de Chile o la Universidad Católica. "Organismos independientes que vean los niveles de contaminación. Hace poco vino un periodista del New York Times, subimos temprano a las 07:30 horas al mirador y notamos que Calama está tapado por una capa de tierra y humo, lo que es altamente tóxico", cuenta la presidenta de la Red de Mujeres.
"Las autoridades son las responsables. Son las que no nos representan, intendentes, gobernadores, seremis que han sido nombrados a dedo", dice María Robles.
Enfatiza que como Red de Mujeres El Loa y dirigente no están en contra de la minería en sí, sino que de aquella que es irresponsable. "Estamos en contra sí de las autoridades de turno que permiten que las mineras destruyan nuestro entorno y calidad de vida", asegura la dirigente.
Defensa del río
Andrea Vásquez, dirigente de la Coordinadora por la Defensa del Río Loa y la Madre Tierra, dice que el daño al ecosistema en Calama se demuestra en primer lugar con la declaración del río Loa como agotado el año 2000. "Es un elemento súper importante porque las mineras consumen gran cantidad de agua para sus procesos", dice Vásquez. Recalca que el río San Pedro en Inacaliri está completamente entubado: "Ya no existe ese río y era un afluente del Loa súper importante", enfatiza.
En cuanto a la contaminación del río, la dirigente dice que hay estudios que hablan que la contaminación de las aguas es bastante grande, sin embargo, es difícil encontrar documentos que asocien a la minería con la contaminación. "No obstante, se han encontrado elementos en el río que sólo se generan a partir de los procesos propios de la minería", asegura Andrea Vásquez.
En segundo lugar, la dirigente recalca que otra forma concreta de demostrar el daño es la declaración en 2009 de Calama como zona saturada con material particulado MP10. "Estos elementos enfatizan que la ciudad es una zona de sacrificio, que está contaminada y que aun así se están aprobando proyectos a pesar que existe un decreto que declara la ciudad como zona saturada", indica la loína.
Según Vásquez, las afectaciones de la minería en la ciudad son más grandes que los beneficios. "Existen 40 yacimientos mineros en Calama, pero aún así tenemos un índice de cesantía de 9,1% que se viene arrastrando desde el año 2009", explica la dirigente.
Soluciones
El gobernador de la provincia El Loa, Claudio Lagos, recalca que la minería "siempre va a generar una externalidad negativa en el medioambiente. Sin embargo, siempre se ha hablado de una minería sustentable para que con la tecnología adecuada el daño al medioambiente sea mínimo", asegura.
Recalca que hacia eso se está apuntando a una minería que no se imponga ante la vida de las personas y del ecosistema: "Hay que pensar que hace 50 años no existía este concepto. La minería se llevaba a cabo completamente desregulada", explica el gobernador.
No obstante, recalca que últimamente ya se avanza en la temática y más aún desde la creación del Ministerio de Medioambiente en el primer gobierno de Michelle Bachelet.
"Se han generado políticas más claras en cuanto a la regulación. Falta mucho aún, pero no hay una despreocupación. Estamos en un momento donde se genera minería sustentable para que el medioambiente se dañe lo menos posible", concluye Lagos.
A su vez, dice que si la solución de algunos es cerrar las mineras no es algo viable, pues "sería monstruoso y catastrófico para nuestra región y el país", asegura la máxima autoridad provincial.
Cabe destacar que la Corporación Nacional Forestal (Conaf) a través de la protección de parques nacionales como el Llullaillaco o la Reserva Nacional Los Flamencos se preocupan por el cuidado del ecosistema en humedales y otros lugares del interior de la provincia.
En cuanto a la rana del Loa, la cartera de Medio Ambiente en la región, realizó un proyecto de investigación enfocado en la conservación de este anfibio. Este plan tenía como objetivo difundir y dar a conocer la especie a la comunidad para que sea valorada como patrimonio.
Además se llevó a cabo una investigación sobre la biología y ecología del anfibio con el objetivo de desarrollar una campaña más profunda de difusión y orientar medidas de protección.
Tanto María Robles como Andrea Vásquez hacen un llamado a la población a informarse sobre los problemas medioambientales que provocan daño al ecosistema y a la salud de todas las familias loínas.
2000 fue el año que se declaró el río loa como agotado por petición de la comunidad. Este hecho influye en el ecosistema, la agricultura y la existencia de fauna.
40 yacimientos mineros existen en la zona, los que según, dirigentes provocan más daño que beneficios lo que se ejemplifica con el alto índice de cesantía de la ciudad.
MP10 es el material particulado por el que se declaró a Calama como zona saturada en el año 2009.