EL ESTUDIO SE DESARROLLARÁ EN MAYO Y SE EXTENDERÁ POR UNA SEMANA MONITOREANDO A UNA POBLACIÓN DE 30 A 40 NIÑOS.
Investigadores de la Universidad de Antofagasta estudiarán la calidad del sueño en niños que habitan en localidades ubicadas a gran altura para establecer una posible relación entre esta condición, y el desarrollo de cuadros de hipertensión arterial.
El estudio, que tendrá carácter descriptivo, considera el monitoreo de un grupo de menores de entre 12 y 15 años de la comuna de San Pedro de Atacama, quienes serán analizados con un holter de electrocardiograma y un actígrafo para evaluar la calidad del sueño, a lo que se suma la aplicación de una encuesta para conocer sus hábitos de actividad física, alimentación, entre otros.
"Vamos a estudiar una población de entre 30 a 40 niños que reside en gran altitud, pues hay estudios que sugieren que los menores expuestos a este ambiente, pueden tener alterado su ciclo circadiano (respuesta del organismo al ciclo de 24 horas de luz y oscuridad) y esto contribuye a que tales menores sean hipertensos en un futuro. Con este estudio esperamos entregar una data importante para dar respuesta esto", explica el doctor en Fisiología y académico de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Antofagasta, David Andrade Andrade, líder del proyecto.
El investigador detalló que los síntomas más frecuentes de un ciclo circadiano alterado son manifestación de sueño y cansancio, una baja reacción a estímulos, lentitud en algunas acciones y micro despertares durante la noche.
Subdiagnóstico
La hipertensión es una enfermedad silenciosa y por eso gran parte de la población que sufre esta patología médica, desconoce su existencia y no recibe el tratamiento adecuado, lo que acarrea distintos riesgos.
En niños, el subdiagnóstico es aún mayor debido a que en su etapa inicial esta enfermedad no presenta síntomas y a los menores se les controla muy poco la presión arterial.
Ante esta problemática, la Universidad de Antofagasta y la Pontificia Universidad Católica, desarrollan el proyecto "Sistemas ciberfísicos para la atención médica personalizada: un enfoque basado en datos para mejor manejo de la hipertensión y la diabetes", dirigido por doctora María Rodríguez Fernández, de la PUC.
De tal iniciativa surgió una línea de investigación específica denominada "Alteración del ritmo circadiano inducido por hipoxia hipobárica y su influencia en la presión arterial y ritmo cardiaco", que es la conducida por el Dr. David Andrade y que busca construir un sistema para la detección temprana de factores de riesgo asociados a la hipertensión en la población pediátrica que vive en altura.
Investigación
Como parte de esta investigación, el equipo liderado por David Andrade realizará este año dos visitas a la comuna de San Pedro de Atacama para extraer los datos a los menores.
La metodología tiene tres fases: registrar, almacenar y analizar, donde la última etapa será ejecutada por el Instituto de Ingeniería Biológica y Médica de la Universidad Católica.
"Todo este análisis se realizará durante 1 semana en el mes de mayo, y la finalidad de todo este trabajo es generar un sistema que permita registrar y alertar ante posibles eventos que sean relevantes en el desarrollo de la hipertensión e incluso la diabetes", señala Andrade.
Para el académico, este estudio colaborativo cobra mucha relevancia a nivel regional y nacional, ya que la población pediátrica de Chile tiene un índice elevado de obesidad debido a una alta ingesta calórica y a algunas conductas de riesgo, como pasar gran parte del día frente a una pantalla sin realizar actividades físicas, todo lo cual eleva el riesgo de sufrir enfermedades como la hipertensión.
"La obesidad es cada vez más frecuente en estas edades, los niños se alimentan mal, hacen muy poco deporte y pasan la mayor parte del día frente a una pantalla. Todo eso genera una mayor probabilidad de desarrollar este trastorno, por lo que generar un sistema de detección que permita conocer si los niños tendrán problemas, es sumamente relevante", apuntó.
Aplicación
La investigación tiene una duración de tres años y a futuro se pretende desarrollar una aplicación tecnológica (App) de uso público que permita detectar riesgos relacionados con hipertensión y diabetes en edades tempranas.
"La App es importante porque entregará un valor energético de todo lo que se haga durante el día, por ejemplo, actividad física, descanso, alimentación. De esta manera, el usuario recibirá información sobre su condición de salud y probabilidades de desarrollar hipertensión o diabetes", comenta el académico de la UA.
"Esta plataforma contribuirá al monitoreo personalizado de los parámetros claves de cada usuario y permitirá intervenir en su dieta", agrega.
Durante su segundo año, el estudio del Dr. Andrade utilizará el Centro de Medicina en Altura que está habilitando la Universidad de Antofagasta en el Campus Coloso para analizar otras variables que pueden ser relevantes en el estudio.
"La obesidad es cada vez más frecuente en estas edades, los niños se alimentan mal, hacen muy poco deporte y pasan la mayor parte del día frente a una pantalla". Dr. David Andrade, Investigador