Tribuna Abierta. El saqueo de los recursos naturales en manos extranjeras

Con la firma reciente del tratado transnacional TPP11 y el reciente acuerdo por el litio firmado con la Unión Europea el 2023, es válido preguntarse a donde van a parar las ganancias por las ventas nuestras materias primas más importantes.

Envie este Recorte Version de impresion de este Reportaje Publicado el 17 de abril de 2024 Visto 329 veces

Si bien en el caso de acuerdo de libre comercio firmado con la EU firmado, se establece que al menos 50 % de participación en el mercado deberá estar en manos de la empresa “estatal” Codelco, no debemos olvidar que el estado Chileno es propietario de tan solo 31% de la empresa que alguna vez fue 90% estatal.

A finales de febrero, 2023 el gobierno chileno firmo un tratado de libre comercio con la Unión Europea, cuyo alcance significa una rebaja del 95% de los impuestos afectos al comercio de litio y cobre, lo cual significa una perdida millonaria para el estado.

Las grandes potencias mundiales están especialmente interesadas en los depósitos de materias primas de los salares atacameños, sobre todo litio y cobre para poder llevar a cabo el tan ansiado recambio energético que les exige su legislación.

Aquí es donde se pone de manifiesto el fraude del llamado "capitalismo verde": mientras Europa se pasa a los coches eléctricos y presume de neutralidad climática, el litio necesario para las baterías se extrae en Chile y destruye invaluables hábitats en el proceso.

Para extraer litio se utilizan grandes cantidades de agua: 2.000 litros de agua para producir 1 kilogramo de litio, y todo esto en uno de los lugares más secos del mundo, lo cual significa privar a la población local del suministro de agua potable. Un gran ejemplo de esta devastación es el poblado de Cupo, una pequeña comunidad indígena Likan Antay al interior de Calama donde hoy ya no hay a agua ni para sus habitantes endémicos humanos ni para las especies animales nativas, ni tampoco para la exótica vegetación que crecía en medio del desierto y todo eso sin mencionar la contaminación por arsénico en el agua potable de Calama.

Desde hace años el gobierno ha prometido cierta participación del Consejo de Pueblos Atacameños en las negociaciones, pero aún no se ha hecho realidad. El grupo activista "Chile mejor sin TLC" habla, acertadamente, de "colonialismo de energía".

Los grandes beneficiarios de los acuerdos son siempre las empresas transnacionales mediante normas de protección de las inversiones que ofrecen a los inversores extranjeros garantías ejecutables que les favorecen estructuralmente solo a ellos.
Las secciones del acuerdo sobre equidad de género en las empresas y protección del medio ambiente no son más bien recomendaciones.

Las empresas se benefician mucho de que las estrictas normativas de la UE sobre derechos medioambientales y laborales no tengan que aplicarse en Chile y de que puedan pagar salarios mucho más bajos pese a tener niveles de precios comparables.

EL coste de produccion es claramente más bajo en Chile debido a las diferencias entre los estándares de cuidados de la salud medio ambiental y laboral, en otras palabras, la vida de la clase vale menos dinero.

Lo han privatizado todo, los dueños son otros y tienen intereses personales que desdeñan el bienestar social, medio ambiental y económico.

las ganancias van a los bolsillos de los privados, nosotros ponemos los muertos, ellos poden los bolsillos para llenarlos de dinero mientras en lugares como Calama el porcentaje de cáncer a la vejiga, riñones, estómago y pulmón supera en 6,5 veces la media nacional.

Hay que romper tanto estas condiciones globales de explotación como toda la mentira del capitalismo verde. Es urgente volver a hablar de la nacionalización de los recursos naturales y un plan de emergencia medio ambiental controlado por trabajadores y comunidades, terminando con el saqueo por parte de empresas imperialistas y sus consecuencias adversas para la población trabajadora.

Meli y Myriam. Valparaíso



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