Volcán Láscar es la amenaza natural más grande del norte

La erupción, de tipo freática, que tuvo el volcán Láscar el pasado 30 de octubre, es una manifestación habitual y esperable para la constante actividad que posee este macizo, según explicó el geólogo y jefe de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica del Sernageomín, Luis Lara

Siendo la variabilidad su comportamiento esperado, está latente que pueda hacer erupción en cualquier momento y por las características de este volcán, esta sería de una mera explosión; por esta razón el Láscar es el quinto más peligroso del país y la amenaza natural más importante del norte del Chile.

Alerta

El volcán Láscar continúa en alerta amarilla por inestabilidad en su umbral base, la cual está representada por emisiones débiles de ceniza, incandescencia nocturna, anomalías técnicas observadas por los satélites y un aumento de las emisiones de dióxido de azufre (SO2) hacia la atmósfera.

El Sernageomín ha informado que aunque los valores energéticos de la actividad sísmica siguen siendo bajos, sugiriendo la participación de un volumen pequeño de material magmático que ha impulsado la actividad observada en superficie, no se descarta la posibilidad de generación de nuevos pulsos de salida de material particulado, simulares al ocurrido recientemente.

Por lo anterior, la zona de peligro está contenida en un radio de cinco kilómetros en torno al cráter activo, ya que el volcán Láscar posee siete. Sin embargo y tal como explicó Lara, tuvo una erupción que está dentro de lo esperable.

"En rigor lo que ocurre es que el sistema hidrotermal se presuriza y reacciona despejando el conducto y emitiendo material piroclástico, en este caso como un pulso de menor envergadura", precisó el experto.

Situación y peligroso

"El volcán se encuentra aún inestable pero con tendencia al nivel de base (a normalizarse). Pero es altamente probable que ocurran pulsos de emisión de cenizas que afecten la parte alta del edificio", comentó Lara.

Según mencionó el profesional, los peligros del volcán se asocian a su historia y revisando ella se infiere que el Láscar puede generar erupciones de gran magnitud, con columnas eruptivas de más de 15 km de altura y flujos piroclásticos. En tanto, existen diferentes escenarios intermedios dependiendo de la magnitud de la erupción.

"El hilo que posee la superficie del edificio volcánico es un factor que condiciona la intensidad de los procesos eruptivos; en algunos casos provoca lahares primarios o secundarios (aluviones volcánicos). Sin embargo, en el volcán Láscar este no es un factor muy relevante en comparación con los volcanes del sur de Chile", aclaró Lara.

Erupción

El tipo de erupción más peligrosa que podría tener el Láscar, es una de características pliniana, según mencionó el Jefe de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica del Sernageomin, Luis Lara, explicando que es una que está asociada a magmas de composición félsica (ácidos), caracterizándose por su alto grado de explosividad, con manifestaciones muy violentas en las cuales se expulsan grandes volúmenes de gas volcánico, fragmentos y cenizas.

"En 1993 el Láscar tuvo una erupción de este tipo, la cual tuvo una columna eruptiva de 20 km de altura y flujos piroclásticos que alcanzaron hasta casi 10 km de distancia. Por esta razón es sin duda el volcán con mayor actividad habitual en el norte de Chile", precisó Lara.

1993 fue el año en que el volcán Láscar tuvo la última erupción pliniana, siendo la mayor en su historia.

04/2014 el Láscar estuvo en alerta amarilla, condición que se vuelve a repetir. Su actividad es latente.