Comunidades lickanantay marchan en Calama en defensa de los salares

Representantes de diversas comunidades lickanantay marcharon en defensa de los salares de la región de Antofagasta. La «Marcha por la Defensa de los Salares» se realizó en Calama y fue organizada como respuesta a lo que los manifestantes calificaron como continua explotación y saqueo de estos ecosistemas únicos por parte del Estado y las empresas mineras. La declaración pública emitida por los organizadores expresa un rechazo rotundo al extractivismo que ha devastado la región.

«Por el derecho de los pueblos a la libre determinación frente al saqueo de nuestra Puri (agua) y Madre Tierra», reza el documento, subrayando la necesidad de preservar la naturaleza y la identidad ancestral. Los participantes de la marcha destacaron que la explotación de los salares no solo afecta el medio ambiente, sino también la cultura y la vida de los pueblos originarios que han habitado el desierto durante milenios.

El documento señala que «el Estado de Chile por más de 100 años ha usurpado y destruido nuestro territorio, desviando, contaminando y desecando ríos, lagunas y aguas subterráneas». Los líderes comunitarios hicieron un llamado a la conciencia y al respeto por los derechos ancestrales, enfatizando la importancia de un enfoque sostenible y respetuoso con el medio ambiente.

Durante la marcha, los manifestantes también pidieron perdón por la «desconexión y falta de hermandad» que ha permitido la destrucción de su territorio. «Nuestro trabajo es el de compartir el conocimiento que permite lograr las capacidades de traducir nuestra naturaleza generando nuestro propio desarrollo», afirmaron los organizadores, haciendo hincapié en la necesidad de unirse para enfrentar los desafíos actuales.

La protesta no solo buscó visibilizar la problemática, sino también instar al Estado a reconocer a la Nación Lickanantay y devolver el control de los territorios ancestrales a sus legítimos guardianes.