EL ÚLTIMO PERRITO QUE MURIÓ ENVENENADO EN EL SECTOR DE SANTA ADRIANA EN CHIU CHIU. VECINOS PIDEN MEDIDAS A LAS AUTORIDADES
La comunidad de Chiu-Chiu se encuentra alarmada por el constante envenenamiento de perros domésticos, un problema que ha generado indignación y que, según vecinos, se repite cada año. Marcelo Jara Pizarro, vecino de la localidad, denunció que recientemente una vecina perdió a su perro salchicha debido a cebos con veneno colocados en la zona.
"Hoy en la mañana (ayer), una vecina publicó en nuestro grupo interno que le habían envenenado su perrito, un perrito salchicha súper chiquitito que no le hace daño a nadie", señaló Jara. Estas acciones, según los vecinos, se justifican como una medida para controlar a los perros abandonados que llegan a Chiu-Chiu desde Calama y otros sectores cercanos, pero los afectados terminan siendo las mascotas de los residentes.
De acuerdo con los testimonios, el veneno utilizado sería de origen boliviano y conocido como "Asesino", un compuesto letal que provoca una larga y dolorosa agonía. Jara describió el trágico desenlace de sus propias mascotas.
"La gente llega y tira el veneno y dice ya se va a morir rápido, pero no. Cuando se me murieron mis perros estuve 12 horas con el perro agonizando, y se revientan por dentro. Es una muerte súper trágica". Según él, el veneno es camuflado con carne o pollo, lo que facilita que los animales lo consuman.
El problema, explica Jara, tiene raíces profundas. "La gente acá pone cebos de veneno para eliminar los perros que abandonan en Santa Adriana. Pero los que pagamos somos los que amamos a nuestras mascotas. En el último año, a mi vecina del frente le mataron cinco pitbulls, y a otro vecino le envenenaron seis Akitas", detalló.
A pesar de las denuncias realizadas a Carabineros, Jara afirmó que las autoridades no han tomado acciones concretas. "El año pasado me mataron a dos perros e hice una denuncia, pero no tuvo ninguna repercusión. Ni siquiera vinieron a ver", lamentó.
Desde la Oficina de Tenencia Responsable de Mascotas de la Municipalidad de Calama, la veterinaria jefa, Paulina Carrasco, enfatizó que el envenenamiento no es una solución adecuada para enfrentar esta problemática.
"Esto no es la forma, y lo hemos hablado cientos de veces. Generalmente, los animales que están atacando no son los perros de los vecinos. En Chiu-Chiu, tienen claro quiénes son los perros responsables de estos incidentes, pero el envenenamiento afecta a todos, incluso a los animales que tienen dueños responsables", explicó Carrasco.
Ambos coinciden en que el abandono de perros en la zona es el principal detonante de la situación. Sin embargo, Marcelo Jara subraya que falta una respuesta efectiva de las autoridades. "No hay ninguna reacción para frenar esto, ni el envenenamiento ni el control de las personas que vienen a abandonar perros. Al final, los que pagan son los perros de nuestras casas", expresó.
La comunidad de Chiu-Chiu exige mayor atención a esta problemática, que afecta no solo a sus mascotas, sino también a la tranquilidad y seguridad de sus hogares.
El envenenamiento de animales no solo es éticamente reprobable, sino que también está tipificado como un delito en Chile bajo la Ley de Tenencia Responsable de Mascotas (N°21.020), conocida como Ley Cholito.
Según esta normativa, el maltrato o crueldad hacia los animales, incluido el uso de veneno, puede ser sancionado con multas que van desde 10 a 30 UTM (entre $600 mil y $1 millón 800 mil aproximadamente) y penas de cárcel que pueden llegar hasta los tres años, dependiendo de la gravedad del caso.
"No hay ninguna reacción para frenar esto, ni el envenenamiento ni el control de las personas que vienen a abandonar perros". Marcelo Jara Pizarro, Representante de los vecinos
N° 21.020 es la Ley de Tenencia responsable de mascotas y que sanciona con dinero y cárcel a los que envenenan.