El proyecto, que culmina luego de tres años de trabajo, ha permitido contribuir a la inserción de algarrobos y chañares como recursos forestales no madereros en el desierto de Atacama, fomentando así su propagación, cuidado y producción.
El proyecto, que culmina luego de tres años de trabajo, ha permitido contribuir a la inserción de algarrobos y chañares como recursos forestales no madereros en el desierto de Atacama, fomentando así su propagación, cuidado y producción.
Cuatro nuevas bebidas alcohólicas en base a especies nativas estarán disponibles a turistas, a la comunidad de San Pedro de Atacama, y los consumidores chilenos en general. Se trata de licores ancestrales en base a recursos forestales no madereros de algarrobo y chañar, que podrán producirse gracias a la implementación e inauguración de una innovadora planta de proceso, especializada para estos frutos.
El lanzamiento se enmarca en el cierre del proyecto “Licores nativos del desierto de Atacama”, apoyado por Fundación para la Innovación Agraria (FIA) y ejecutado por la Universidad de Antofagasta. La iniciativa fue trabajada en conjunto con la Asociación Indígena Consejo de Pueblos Atacameños, lo cual permite a las comunidades locales implicadas producir licor nativo, con procesos que velen por la inocuidad y trazabilidad, relevando el patrimonio ancestral.
La planta fue inaugurada con la presencia del presidente del Consejo de Pueblos Atacameños, Manuel Salvatierra, de los senadores de la región de Antofagasta, Isabel Allende, Yasna Provoste y Alejandro Guillier; del subdirector de la FIA Rodolfo Campos, y de la directora del proyecto por parte de la Universidad de Antofagasta, Dra. María José Larrázabal, entre otras autoridades.
Al respecto, el presidente de la Asociación Indígena Consejo de Pueblos Atacameños, Manuel Salvatierra, destacó que “es importante que le demos un valor a los recursos naturales que tenemos dentro de nuestro territorio, a especies como son el algarrobo y el chañar. El proyecto considera los desafíos de emprender, entendiendo que San Pedro es un destino turístico importante dentro del país, y va a servir también para darle una mejor calidad de vida a nuestras comunidades”, afirmó.
Por su parte, el subdirector de FIA, Rodolfo Campos, destacó que “este desarrollo permite innovar y hacer rentable la agricultura en una comuna como San Pedro de Atacama, involucrando a las comunidades atacameñas de una manera sustentable que respeta lo ancestral, valoriza el patri-monio agroalimentario y posee un enfoque comercial”, expresó.
Cabe mencionar que como producto comercializable, la planta desarrollará cuatro bebestibles: dos bebidas fermentadas, una de chañar y otra de algarrobo, de baja graduación alcohólica (cerca de 5 grados); y dos especies de aguardiente, las cuales se están produciendo y estandarizando a 35 grados de alcohol.
Como próximos pasos, las comunidades atacameñas que fueron capacitadas en gestión, administración, comercialización y operación en la producción de licores, serán las encargadas de gestionar la planta, para producir las bebidas y conquistar a nuevos consumidores que aprecien productos nativos, patrimoniales, y con valor agregado.