Albemarle, el mayor productor mundial de litio, dijo el miércoles que recortaría costes por segunda vez este año y que todo, excepto su dividendo, podría estar en la guillotina.
La agresiva medida se debe a la caída de los precios del metal utilizado para fabricar baterías de vehículos eléctricos, después de que la empresa registrara pérdidas en el segundo trimestre.
Las acciones cayeron un 2,9% hasta los 91 dólares en las operaciones posteriores al cierre.
El proveedor de Tesla y sus homólogos se han visto sacudidos en el último año por el exceso de oferta de litio procedente de China y una suavización de las agresivas tasas de adopción de vehículos eléctricos que ha arrastrado a la baja los precios del metal ultraligero y ha retrasado las expectativas sobre el tiempo que podría durar la transición energética.
General Motors, por ejemplo, se echó atrás a principios de este mes en su objetivo de producir un millón de VE anuales para 2025 en Norteamérica.
Albemarle, con operaciones en todo el mundo, ya había recortado su plantilla en enero. Sin embargo, los precios del litio han seguido bajando, desde una media de 20 dólares por kilogramo a finales del año pasado hasta una horquilla actual de entre 12 y 15 dólares por kilogramo, según la empresa.
"El mercado no está mejorando. En realidad, probablemente está empeorando un poco", dijo a Reuters el director general de Albemarle, Kent Masters. "Estamos utilizando el término 'más bajo durante más tiempo' desde una perspectiva de precios, y tenemos que ser capaces de operar a través de ese descenso".
Para ahorrar costes, la empresa está poniendo en marcha una "revisión exhaustiva de su estructura de costes y operativa" que debería estar terminada en octubre, dijo Masters. Albemarle también planea pausar la construcción de una unidad de procesamiento en Australia y paralizar la producción de una segunda en el emplazamiento.
"Examinaremos todo para conseguir una posición media y ajustada", dijo, añadiendo que están sobre la mesa despidos adicionales y ventas de activos.
El dividendo de la empresa, que se ha aumentado anualmente durante 30 años, probablemente no se vería afectado. "Es importante para nuestros accionistas. Así que nuestro plan es que lo mantendríamos", dijo.
El ritmo de crecimiento de la demanda de vehículos eléctricos en todo el mundo no ha logrado este año mantener las sólidas expectativas, lo que ha asustado a los inversores de la industria del litio. Los analistas de Goldman Sachs, por ejemplo, no esperan que la demanda mundial de litio supere a la oferta hasta 2030.
RESULTADOS
Albemarle registró una pérdida neta de 188,2 millones de dólares, o 1,96 dólares por acción, frente a un beneficio neto de 650 millones de dólares, o 5,52 dólares por acción, en el trimestre del año anterior.
Excluyendo los elementos no recurrentes, Albemarle ganó 4 céntimos por acción. En esa medida, los analistas esperaban unos beneficios de 41 céntimos por acción, según los datos de IBES de LSEG.
Albemarle mantuvo su previsión de beneficios para todo el año, ayudada en parte por los resultados de su división de catalizadores y los recortes de costes, que han ahorrado más de 150 millones de dólares este año.
A pesar de la caída de precios, Albemarle y sus homólogas han dicho en repetidas ocasiones que esperan que la demanda de litio se dispare a finales de esta década, a medida que los vehículos eléctricos se generalicen.
La empresa, con sede en Charlotte (Carolina del Norte), tiene previsto comentar los resultados trimestrales en una convocatoria con inversores el jueves por la mañana. (Reportaje de Ernest Scheyder; Edición de Chizu Nomiyama)
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Publicado el 01 de agosto de 2024
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