El 24 de junio, la Presidenta Michelle Bachelet lideró en el patio de Los Canelos de La Moneda la conmemoración del día nacional de los pueblos indígenas, actividad que se inició con la realización de una ceremonia quechua y mapuche, en la que la Mandataria, incluso, bailó.
Tras esto, leyó un breve discurso, en el que dijo que “hoy día lo que hacemos es reunirnos aquí a hacer ese reconocimiento, para asumir que seguimos en deuda con los pueblos indígenas”.
Las palabras de la Mandataria hicieron eco en sectores del oficialismo, quienes le han manifestado al gobierno su preocupación por la tardanza que existe en el cumplimiento de los compromisos adquiridos con los pueblos originarios.
En octubre de 2013, cuando era candidata presidencial, Bachelet presentó un conjunto de 50 medidas, las que concretaría durante los primeros 100 días de su gobierno.
Dentro de estos compromisos se encontraba la creación de un Ministerio de Asuntos Indígenas, un Consejo de Pueblos Indígenas y la agenda para el desarrollo de los pueblos originarios, que incorporaría medidas en las áreas de educación, salud, tierras y desarrollo productivo.
Sin embargo, en junio del año pasado, y sólo a pocos días que se cumpliera la fecha autoimpuesta por Bachelet, el gobierno informó que ninguna de esas iniciativas sería concretada. ¿La razón? En ese momento el gobierno explicó que se debía realizar una consulta indígena para definir el contenido de las propuestas antes mencionadas. Esto, como forma de cumplir con el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el que fue suscrito por el Estado chileno y se encontraba vigente antes del anuncio de los compromisos de la Mandataria durante la campaña.
De ahí en adelante, no ha existido claridad respecto de las fechas en que estos proyectos finalmente ingresarán al Congreso.
En febrero de este año finalizó el proceso de consulta indígena, que se inició en septiembre de 2014 e incluyó a 122 comunidades del país.
En ese momento, la entonces ministra de Desarrollo Social, Fernanda Villegas, comprometió para el primer trimestre de 2015 el envío de las iniciativas al Congreso. Esto, argumentando que era necesario procesar toda la información recopilada a través de los cinco meses de trabajo.
Después, el 21 de mayo, durante su cuenta pública ante el Congreso, la Presidenta Bachelet aplazó nuevamente la fecha de entrega de estos procesos, asegurando que ingresarían a trámite durante el último trimestre de este año.
La fecha, sin embargo, no es precisa. De hecho, el día de la conmemoración de los pueblos originarios la jefa de Estado sólo se limitó a señalar que eso se produciría “antes de fin de año”.
Desde el Ministerio de Desarrollo Social -cartera encargada de sacar adelante estas iniciativas- sostienen que los proyectos se encuentran en la quinta y última etapa, correspondiente a la redacción final de los documentos.
Junto a esto aseguran que tras el nombramiento de Marcos Barraza como nuevo titular de esa cartera, se decidió crear un equipo de trabajo centrado exclusivamente en sacar adelante esta tarea dentro de los nuevos plazos establecidos por la Presidenta durante su última cuenta pública. “Desde el Ministerio de Desarrollo Social le hemos otorgado máxima prioridad a este proyecto, y estamos en etapa de elaboración. Hoy los esfuerzos están puestos en cumplir esta promesa anhelada por los pueblos indígenas y, por supuesto, por este gobierno”, dijo el ministro Barraza a La Tercera.
Al retraso de esta agenda comprometida desde los inicios de la campaña presidencial, se suma el hecho de que la Mandataria, tras un año y medio de gobierno, aún no realiza una visita de trabajo a la Región de La Araucanía, lo que ha provocado fuertes críticas desde la oposición. A lo largo de 2014, en tanto, Bachelet visitó todas las otras regiones del país.
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Publicado el 06 de julio de 2015
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