Cinco días sin agua. En el mejor de los casos con un suministro escasísimo, “un hilito de agua”. Muchos reclamos a través de las redes sociales, aunque con poca eficacia, ya que recién después de cuatro días de crisis, apareció el municipio haciéndose cargo en parte del problema, repartiendo agua a través de camiones aljibes y con la ayuda de bomberos.
Durante un par de días, la única voz “oficial” que se escuchó fue la del recién estrenado concejal Orlando Cortés Mora.
Al momento de escribir esto, aun no se soluciona el problema del agua. Esperamos que eso ocurra en el transcurso del lunes 12, según las promesas hechas desde el municipio.
Cuando solicitamos una aclaración al Capra, por teléfono y whatsapp, a la presidenta en funciones doña Nancy Bermúdez y el administrador don Francisco Ordenes, recibimos una contestación de este último:
[14:52, 11/7/2021] Francisco Ordenes: Don Gerardo, durante la jornada de hoy se hará un comunicado a través de la municipalidad. Hemos trabajado durante toda la semana para solucionar los problemas que han ido surgiendo uno tras otro cada día y nos ha impedido retomar la normalidad de la distribución de agua, sin embargo dado al esfuerzo de todos quienes estamos involucrados hemos solucionado todo pero hoy surgió una nueva emergencia en la que estamos trabajando
[14:53, 11/7/2021] Francisco Ordenes: Esperamos solucionar la emergencia dentro de la jornada de hoy
[14:53, 11/7/2021] Francisco Ordenes: Igualmente se está gestionando la entrega de agua a través de camiones aljibe de manera gratuita a los ayllus más afectados
[14:54, 11/7/2021] Francisco Ordenes: Si disculpe estamos enfocados en terreno en solucionar estos inconvenientes por lo que no he estado 100% pendiente del teléfono*
Efectivamente, poco después se publicó este mensaje en las redes sociales:
Lo que se refrendó después con un video en que el alcalde Justo Zuleta explicaba la situación y avisaba de las medidas tomadas desde el municipio.
No podemos dejar de notar que según explica el alcalde, todo el sistema está en un estado absolutamente precario, ya que a la falta de una bomba, sigue la falta de un cable (que debe ser muy especial si costó tanto reemplazarlo) y luego una cañería en mal estado. Es decir que cada problema pone en marcha otros. No es muy tranquilizador saber esto, pero al menos es mejor tener claro que nuestro abastecimiento es realmente inestable. Mejor, desde que así podemos ponernos a trabajar en arreglarlo.
Esta situación ha dejado en evidencia, una vez más, es la ineficiencia en la comunicación desde el comité, ya que tuvieron que pasar casi cuatro días para que alguien diera oficialmente una explicación y esta no vino desde ellos sino desde el municipio que, al margen de sus obligaciones sociales, políticas y comunitarias, no es la entidad encargada del crítico tema del agua potable.
En principio, es loable que el alcalde que recién está entrando en funciones haya respondido a la necesidad de la comunidad, pero habrá que ver si la parte final de su comunicado se hace real. Nos referimos a lo que dice de buscar soluciones definitivas hacia la comunidad.
Legalmente hablando, no hay nada que el municipio pueda hacer directamente, ya que el comité no depende de ellos. Los encargados de velar por el correcto funcionamiento son la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) y también la Seremia de Salud, que en todo este episodio han guardado un silencio vergonzoso. Sobre todo la señora Rossana Díaz, que además de haber sacado el control de entrada al pueblo, no parece que haya dimensionado lo catastrófico que es no contar con un buen suministro de agua potable en momentos que sufrimos una pandemia, ademas de haber retrocedido a la fase dos.
Esperamos que la buena intención declarada por Justo Zuleta se haga realidad, en este desafío para él de encausar una solución a una necesidad urgente del pueblo. Sabemos que la situación actual es en gran parte responsabilidad de la administración anterior (como tantas otras que van a ir apareciendo) ya que fue la secretaria municipal de entonces, doña Roxana Aranda Caru quien ilegalmente validó a la directiva que ahora está en funciones.
También es claro que la salida no necesariamente pasa por elegir nuevas dirigencias, porque a estas alturas no se ve de donde pueda aparecer gente capacitada de verdad para tomar las riendas sin dejar otro desastre. Si de algo a adolecido este comité es de una administración técnica eficiente, que corresponda con el tamaño y complejidad de la población actual de San Pedro. Sumado a eso las corrupciones varias que hemos atestiguado por años desde que funciona el comité
Lo que se necesita es un cambio estructural del comité, con nuevos estatutos y el acento puesto en la calificación técnica de quienes dirijan. Recordemos que cuando se creo el comité tenía algo así como 50 arranques. Hoy hay 2000.
A pesar de algunas ridículas voces, no podemos volver a sacar agua del canal y ponerle pencas de tuna. Los que dicen eso no volverían a usar el teléfono de manivela o uno de esos teléfonos públicos con monedas. Desde lo que no podrían escribir tonteras en las redes.
Mal que nos pese, eso ya está en el pasado. Lo que necesitamos hoy es una organización profesional y experta. Sin excusas, respondiendo por la responsabilidad que tienen.
Esperamos que el nuevo alcalde tenga la muñeca política, la inteligencia práctica, el valor moral y la determinación necesaria, para de verdad cambiar de una vez por todas, la triste realidad en la que vivimos.
* Don Francisco ahí se refería a la demora en contestar, aunque debemos reconocerle que no fue tanto tiempo.